Cada vez son más aquellos aparatos que en su día tenían algún botón con un objetivo específico y que, actualmente, dicha función se controla de forma automatizada -por un ordenador central- y el hecho de pulsarlo no cambia absolutamente nada. Es el caso de numerosos semáforos en los que se puede ver la típica cajita en el que indican al peatón que pulse para cambiar a verde o el botón que se encuentra en muchos ascensores y que en teoría sirve para que se cierren las puertas desde el interior.

La primera vez que uno viaja a Japón se da cuenta de lo diferente que hacen las cosas en su cultura. No sólo las calles de sus ciudades no suelen tener nombres, cuando vas a cruzar la calle, los semáforos no tienen la luz verde internacional que indica avanzar. Una pista: tiene que ver con su lengua.

Los sistemas autónomos de conducción no solo cambiaran los automóviles tal y como los conocemos. También cambiarán las carreteras. Un investigador del Centro de Innovación del Transporte de Carolina del Sur nos ofrece un adelanto de ese futuro: cruces sin atascos... y sin semáforos.

La ciudad de Bodegraven, en Países Bajos, está probando semáforos de luz en el suelo para alertar a los adictos al WhatsApp y las redes sociales cuándo pueden cruzar. Se trata de indicadores con una tira de LED incrustados en la acera para que pueda verse si se puede o no cruzar sin necesidad de levantar la vista del suelo. Las luces se encienden en rojo o verde en sincronía con los semáforos y funcionarán de noche y de día para alertar a los peatones.

En casi todas las ciudades del mundo hay semáforos que nos invitan a pulsar un botón para esperar el verde, pero, ¿realmente sirven de algo?

En el marco de Smart City Expo World Congress, la Fundación i2CAT ha presentado una aplicación para semáforos que, utilizando su tecnología de comunicación por luz visible (VLC), permite que estos objetos puedan interactuar con el conductor a través de su móvil e informar del tiempo que le queda al semáforo en verde o en rojo para cambiar de estado. El principal objetivo de este proyecto es ayudar al medioambiente y reducir el consumo de combustible, además de conseguir un tráfico más fluido.

La pequeña ciudad española de Sant Cugat del Vallés, en la periferia de Barcelona (noreste), ha instalado un semáforo en el suelo para los peatones que pasean por la calle mirando el teléfono móvil.

Se trata de una franja de luces led de color rojo a lado y lado del semáforo de la plaza Quatre Cantons de Sant Cugat del Vallés. La puesta en marcha de esta iniciativa ha supuesto una inversión de 5.000 euros. La medida es pionera y está en funcionamiento en algunas ciudades europea.

En Ucrania se pueden encontrar este tipo de semáforos que son bastante particulares.

Los días en los que todos los semáforos funcionaban solo en base al tiempo quedaron en el pasado.Hoy en día existen diferentes tipos: algunos con el cronómetro de toda la vida,pero otros con sistemas electrónicos basados en sensores, los cuales en muchas ocasiones los sensores no detectan a la perfección a los vehículos que se encuentran detenidos por completo frente a una luz roja.En el canal de YouTube SciShow se han propuesto explicar cómo funcionan los semáforos y sus sensores,además de cómo cualquiera puede manipularlos para que cambien...

A partir de otoño, en ciudades con sistemas de semáforos centralizados, los Audi Q7 y A4 nuevos mostrarán información en tiempo real sobre los semáforos que vayamos encontrando. Así sabremos cuando pisar a fondo como gamberros.

Semáforos activistas que, además de regular el tráfico, sirven para luchar contra la homofobia o la violencia de género.

La ciudad de Augsburgo, en el sur de Alemania, es la segunda en sumarse al proyecto pionero lanzado en Colonia (oeste) de incorporar semáforos especiales en el suelo en algunos cruces de tranvía para llamar la atención de aquellos peatones absortos en las pantallas de sus teléfonos inteligentes.

Siemens presenta, tras 5 años de desarrollo, su proyecto de semáforos inteligentes para evitar atascos y avisarnos cuando se pondrán en rojo.

¿Por qué los ciclistas de Barcelona se saltan sistemáticamente los semáforos en rojo? El reciente atropello de Muriel Casals ha avivado la crispación entre peatones y bicicletas. Las diferencias entre unos y otros son cada vez más grandes. This is war!

Las tres luces que actualmente regulan el tráfico urbano de todo el mundo se completaron cuando, en 1914, el oficial de policía norteamericano William Potts añadió el color ámbar, como etapa de transición entre movimiento y detención, en un semáforo de la ciudad de Cleveland.

En España el primer semáforo eléctrico se instaló en 1926 y se ubicó en el cruce de la calle de Alcalá con Barquillo de Madrid - ¿Cuándo se instaló el primer semáforo eléctrico?En 1914 la compra de automóviles se había extendido tanto que generó problemas de tráfico entre los peatones, los carros. Los coches en las ciudades, los choques eran constantes y había que buscar una solución. El 5 de agosto de ese año, recién estallada la Primera Guerra Mundial, se instalaba en Norteamérica el primer semáforo que no funcionaba con gas.

Está claro que las bombillas LED son un gran triunfo, para la ingeniería e incluso para la Humanidad: no sólo consumen mucha menos electricidad, al transformar más energía en luz y mucha menos en calor, sino que además una vez fabricadas duran mucho más en operación. El problema es que ahora han descubierto que los semáforos LED pueden resultar letales por culpa de una consecuencia inesperada de su eficiencia.

Siempre que uno lleva prisa parece que le tocan todos los semáforos en rojo. Es un axioma propio de las Leyes de Murphy, pero con el que todos los conductores, especialmente aquellos que suelen moverse en ciudad, se sentirán más o menos identificados. Especialmente frustrante es pararse en el semáforo cuando resulta que no vienen ni coches ni peatones del otro lado, pero obviamente tenemos que respetar la señal por seguridad

En 2012, un trío de estudiantes de diseño alemanes idearon un concepto de juego en los semáforos que llamaron StreetPong. Dos años después, y luego de reunirse con fabricantes y autoridades, han llegado a ponerlo en funcionamiento en un semáforo de Hildesheim, con el nombre de ActiWait. Esperan que, además de entretener durante la espera, consiga evitar que los peatones crucen indebidamente debido a las prisas.

Una teoría desgrana qué sucedería ante la ausencia de señalización vial. En lugar de conducción agresiva, el respeto por los otros y la precaución haría que los peatones retomaran el protagonismo de las calles. Y hay un antecedente en Holanda.