La infestación del hombre por parte de los piojos es un hecho bien documentado a través de los siglos. Una de las primeras referencias acerca de estos parásitos aparece en la Biblia, en el libro del Éxodo, cuando Jehová dice a Moisés: “Dí a Aaron: extiende tu vara y golpea el polvo de la tierra para que se vuelva piojo por todo Egipto. En el Antiguo Egipto los piojos suponían un gran problema de salud e higiene, llegando a colocarse lendreras, agujas capilares y peines como parte del ajuar funerario de las tumbas del Egipto predinástico.
|
etiquetas: peines , lendreras , piojos , egipto , arqueología