Nos apostamos cualquier cosa a que muchos habréis pensado… “¿Bad Religion? ¿Cantando villancicos? ¿Estamos locos?”. Bueno, bien, sí. Calma. El discurso que muchos puedan entonar ante este disco ya nos lo sabemos, y no vamos a ser nosotros los que metamos el dedo en la llaga a estas alturas, porque entre otras cosas es una estupidez en la que no queremos entrar.
|
etiquetas: bad religion , abuso , violación , iglesia , cristianismo , religión