Imagina que cometes una falta administrativa; por ejemplo, el impago de una multa de tráfico. En lugar de una sanción, te detienen y eres conducido a una especie de prisión donde, de repente, pierdes todos tus derechos civiles, eres aislado del mundo exterior y quedas incomunicado. Una vez dentro, no tienes acceso a servicios médicos y sociales, tus objetos personales quedan confiscados y compartes habitación con ocho desconocidos, alguno de ellos con enfermedad mental sin acceso a medicación y algún otro con antecedentes penales.