En la gastronomía moderna existe la tendencia a hacer preparaciones que toda la vida se han centrado en un mismo alimento, pero con ingredientes diferentes. Un plato típico que ha sufrido modificaciones y se ha llevado el calificativo de “falso” es el tradicional y cremoso risotto. Sin importar el tipo de grano, esta receta siempre se ha logrado partiendo del arroz. Por ende, hacer algo similar con elementos diferentes ya no podría llamarse del mismo modo.
Entonces, un falso risotto es un platillo elaborado con la misma técnica del risotto convencional, pero con ingredientes alternos al arroz. Para ser considerado parte de este núcleo, el resultado final tiene que ser igual de tierno, cremoso y aromático.