El agua (destilada) es insípida, no tiene sabor; solo se dice que es «agua dulce» cuando se la compara con el «agua salada». Pero en 1935, el químico Klaus Hansen publicó que el agua pesada tiene un sabor dulce; algo paradójico, ya que la estructura química del D₂O es idéntica al H₂O (no influye que el deuterio tiene el doble de masa que el hidrógeno)...Sin embargo, en dosis de pocos mililitros de agua pesada ultrapura, los experimentos con humanos apuntan a que el agua pesada tiene un sabor ligeramente dulzón.