Los medicamentos antivirales que se utilizan actualmente para tratar el coronavirus, como el remdesivir, se dirigen a la replicación del virus, pero si este desarrolla resistencia a esos fármacos dejan de funcionar.
Un nuevo enfoque terapéutico para hacer frente a la covid-19 se centra en la respuesta celular del cuerpo ante el virus, en lugar de luchar directamente contra él, con lo que se ha conseguido, en células de laboratorio, reducir la propagación de la infección en un 99,5%.