Cuando golpeó la pandemia, Estados Unidos necesitaba a alguien a quien pedir consejo. Los medios de comunicación y el público, naturalmente, miraron al Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, un respetado inmunólogo de laboratorio y uno de los asesores de COVID elegidos por el presidente Donald Trump. Lamentablemente, el Dr. Fauci se equivocó en cuestiones importantes de epidemiología y salud pública. La realidad y los estudios científicos lo han demostrado ahora.