El pasado verano, desde una playa de esa prodigiosa ciudad milenaria que se llama Cádiz, hablaba con mis hijos sobre los colores de las estrellas. Veían el color rojo de Antares, el blanco-azulado de Vega, ese nítido azul plateado de Spica (me encantan los colores azul y plata...) o el característico color naranja de Arturo. En la tranquilidad de la noche y después de admirar los colores de las estrellas, uno de mis hijos me dijo "Papá, ¿dónde están las estrellas verdes?" Y como no, no hay mejor inspiración para escribir que la pregunta de un n