Después de la Luna, Marte y los asteroides cercanos, el programa espacial chino tiene en el sistema solar exterior uno de sus objetivos. Alrededor de 2030 el gigante asiático planea lanzar una misión a Júpiter para estudiar su magnetosfera y el interior del gigante gaseoso. El siguiente objetivo del programa espacial chino es nada más y nada menos que el espacio interestelar. O, mejor dicho, que eso suena muy rimbombante, el estudio de la heliopausa, o sea, la frontera donde el viento solar pierde su fuerza en favor del viento interestelar.