Mientras habla apenas se le nota, pero cuando ya no está tan concentrada en hablar, vuelve a hacerlo. Es menos perceptible que hace un año, cuando NIUS habló con ella por primera vez, pero ahí está. Es como un quejido cada dos segundos. Ya no tose, pero su nariz sigue contrayéndose. Lleva así año y medio, desde que padeció covid en octubre de 2020. Por eso cuando le preguntan cómo está responde: "Mejor, pero no estoy bien".
|
etiquetas: tosiendo , covid , persistente