El Dr. Oscar Quijano examina un cráneo en su oficina forense, el cual presenta un orificio de bala, es el resultado de una muerte violenta. Cada día, este doctor forense examina cadáveres arrojados en fosas comunes, en carreteras, incluso en los caminos de los vecindarios. Tras la ruptura de la tregua, la situación ha empeorado hasta el extremo que El Salvador vive la peor oleada de violencia en diez años. Se estima que cada día son asesinadas de forma violenta 16 personas, en un país que tiene la población del condado de Los Ángeles.
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