Este acuerdo, que pretende "prevenir, dificultar y eliminar la pesca ilícita, no declarada y no reglamentada", tiene a partir de ahora valor legal en países como Islandia, Noruega, Australia, Cuba, Sudáfrica, Somalia y Tailandia. Sin embargo, en el acuerdo faltan dos importantes naciones del mercado mundial de la pesca, como son China y Japón.