Hubo un tiempo no lejano en el que el código ético de los periodistas en España prohibía presentar un programa informativo y hacer anuncios en cualquier soporte, y mucho más penado resultaba combinar spot e información en un mismo lapso temporal y por la misma persona. Pero esta higiénica norma también ha saltado por los aires en nuestros medios, aunque siga vigente en la mayoría de los países europeos para escarnio de nuestra (su) laxa conciencia.
|
etiquetas: anunciantes , información , periodismo