Hamsa Diakite no recuerda la última vez que su familia de ocho hijos tuvo una buena comida. Después del golpe al presidente democráticamente elegido de Níger, Mohamed Bazoum, el país enfrentó sanciones económicas del bloque regional de África Occidental, la CEDEAO, así como los países occidentales y europeos, incluidos los Estados Unidos. Sin el 70% de electricidad proveniente de Nigeria y con sus activos bancarios congelados, Níger se está quedando sin comida ni medicamentos y, lo que es peor, sin los 1.77 mil millones de $ de ayudas externas
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