India atraviesa otro invierno inquieto. Entre 200.000 y 300.000 mujeres, hombres y niños acampan en las carreteras que conducen a la capital del país, Delhi.El gobierno de Modi ha impulsado una legislación que busca desregular aún más la agricultura, permitiendo un mayor espacio para que las corporaciones traten directamente con los agricultores, sin la seguridad de los mercados agrícolas regulados por el estado y un precio mínimo de apoyo para ciertos productos básicos esenciales.Las grandes empresas agrícolas tendrán un poder desproporcionad
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