La reputación del gigante sanitario alemán Fresenius -que fue implicado en el soborno de médicos y centros hospitalarios en España- está en caída libre. Ahora un nuevo informe le acusa de eludir el pago de 2.900 millones de euros en impuestos. Otros 8.000 millones de euros de ganancias no gravadas finalmente del grupo se mantienen en cuentas en el extranjero. Las dos filiales irlandesas de Fresenius obtuvieron un beneficio de 47 millones de euros otorgando préstamos a empresas del grupo en España y Estados Unidos, sin ningún empleado.
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