Durante un tiempo las autoridades de Francia habían estado lidiando con varios incendios forestales, sin saber cuál era la causa de estos. Se registraron 20 incendios masivos entre junio y septiembre en el sureste del país europeo, dejando cientos de hectáreas convertidas en cenizas. Después de una larga investigación la policía francesa pudo encontrar el origen de estos siniestros: un adolescente de 14 años. Según informaron medios locales este jueves, el joven estaba siendo vigilado desde hace semanas por las autoridades.
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