Los nuevos datos de la EPA (referidos al segundo trimestre de 2014) reflejan unos resultados bastante positivos en términos de creación de puestos de trabajo y de reducción del paro. Sin embargo, esta noticia no es ninguna sorpresa y tampoco motivo de alegría: lo poco que está cambiando el mercado laboral no supone ninguna transformación que dé paso a una intensa creación de empleo y mucho menos en unas condiciones dignas y razonables.
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