El error contable en el que ha incurrido la Dirección General de la Guardia Civil en el abono de la productividad y la nocturnidad de los agentes durante 15 meses seguidos se está transformando en pequeños dramas individuales para algunos de los afectados. La mala computación de los mencionados conceptos entre abril de 2015 y junio de 2016, admitida por el Servicio de Retribuciones de la institución, ha provocado la pérdida de más de la mitad de su sueldo a algunos de los funcionarios que cobraron de más durante los citados meses.
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