Basuki Purnama, gobernador de Jakarta, de etnia china y cristiano, ha sido sentenciado a 2 años de cárcel por blasfemia contra el islam, una pena más severa de lo esperado y que llega en un momento de tensión por la creciente influencia de grupos islamistas en el mayor país musulmán del mundo. La acusación pedía 1 año por delito de odio. Purnama niega haber cometido algún delito, pero se ha disculpado por comentarios que hizo el año pasado criticando que sus opositores usaran el corán para hacer campaña política en las elecciones a gobernador.
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