Como consecuencia de las crecientes olas de calor extremo, más de la mitad de Estados Unidos padece la peor megasequía en 1,200 años. Según los registros meteorológicos de Estados Unidos, no ha habido peor aridez en el país desde el año 800 d.C. Además, aseguran los autores del estudio publicado en
Nature Climate Change, la megasequía que aqueja hoy al Oeste no terminará pronto. Por el contrario, podría extenderse hasta el final de esta década.