El 14 de marzo de 2023, cuando José Luis Martínez-Almeida prometió desde Valencia que si salía reelegido como alcalde de Madrid en las elecciones del 28 de mayo, se celebraría en la capital una mascletà. Se dieron todos los condicionantes que puso sobre la mesa el conservador: su victoria, la de su ahora homóloga valenciana, María José Catalá, y finalmente la mascletá. Casi un año después, el Puente del Rey se disfrazó de enclave de Valencia en Fallas, con ruidos y olor a pólvora por doquier. También con innumerables críticas de la oposición.