En el primer pico de la crisis, cuando los periódicos titulaban rescate, quiebra y caos, pensé: bueno, al menos esta situación nos enseñará algunas lecciones. La importancia de la educación, los peligros del pelotazo, del éxito fácil y de la especulación como forma de riqueza. Lo hablé con amigos, porque entonces, igual no lo recuerdas, solo se hablaba de “ay, Dios mío, que nos vamos todos a la mierda”. Y, cada vez que exponía mi teoría, “esta crisis algo bueno traerá”, la gente me miraba como si fuese yo un pobre idiota o, peor, un optimista.
|
etiquetas: todos robaríamos , si pudiésemos , crisis , honradez