Desde que empezó a operar en España, la Casa del Rey ha tributado el grueso de sus beneficios en Suiza. Esto va a cambiar a partir de enero, cuando empezará a facturar su negocio en España en territorio nacional. De hecho, ya en octubre dio un paso en esta dirección al cambiar su denominación en el registro mercantil al de «Casa del Rey, Servicios de Gestión de la Monarquía en España», y también el objeto social, en que ya figura «la representación institucional de la jefatura de Estado española»