El magistrado De Egea ignoró las pretensiones del comisario jubilado: ni paralizó la tarea de copiado y extracción de los dispositivos informáticos ni confió a agentes del CNI la labor de expurgo de la información, como le pedía Villarejo. El juzgado ha enviado los discos duros para su volcado y posterior análisis a la Brigada de Investigación Tecnológica y a la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional, a las que el agente de policía retirado ha señalado implícitamente por la filtración de las cintas de Corinna zu Sayn-Wittgenstein.
|
etiquetas: villarejo , discos duros , cni