Oficialmente, la industria de la psiquiatría moderna se ha vuelto loca. Prácticamente cada emoción experimentada por un ser humano -- tristeza, congoja, ansiedad, frustración, impaciencia, emoción -- ahora está siendo clasificado como un "trastorno mental" exigiendo tratamiento químico (con medicamentos recetados, por supuesto). En español:
bit.ly/13i1Son