Varias instalaciones en los Estados Unidos y otros países mantienen depósitos morbosos llenos de cabezas y cuerpos humanos congelados, esperando el futuro. Son parte de una historia que es macabra, oscuramente humorística y, sin embargo, entrañablemente sincera.

Aunque el término “hibernación” y su posible uso tanto en medicina como en viajes espaciales ha sido de dominio público desde hace algún tiempo, la realidad sobre la aplicación de esta tecnología puede variar un poco en la vida real. Sin desmentir el extraordinario beneficio que proporciona en algunos casos como el trasplante de órganos, el verdadero uso sobre la tripulación de una nave espacial en un largo viaje aún depende de varios factores, siendo el primero y más importante de ellos el reanimar al primer ser humano en tierra después de hab

Ha pasado más de medio siglo desde el día en que el cuerpo de la primera persona fue criogenado en California, después de haberlo enfriado a menos de -70ºC. Este hombre era James Bedford, que está en un estado frío en nitrógeno líquido, esperando que la ciencia se desarrolle lo suficiente como para darle otra oportunidad en la vida. En los últimos 51 años, la criónica se ha desarrollado significativamente e incluso se ha convertido en un negocio, y la cantidad de personas congeladas que esperan la resurrección ya son muchas.

Todos habréis oído hablar de la criogenización humana (también denominada, más correctamente, crionización), ese proceso por el cual una persona es helada -habitualmente para esquivar a la muerte- y años después devuelta a la vida de forma milagrosa. Pero, más allá de la leyenda urbana (ese Walt Disney congelado) o de la ciencia ficción, nadie ha demostrado que la criogenización humana sea viable. Al menos de momento.

¿puede cualquier tecnología, incluso en teoría, preservar las características únicas de la mente de un individuo? Los investigadores han logrado progresos en este área, criopreservando con éxito unos ovarios de oveja y extremidades de rata, y recuperando de forma rutinaria los riñones de conejo después de enfriarse a -45 ºC. En este artículo trata sobre la cada vez mas extendida idea sobre la posible criopreservación de personas para su recuperación en un futuro.

Basada en la idea de preservar el cuerpo de una persona a temperaturas muy bajas con la esperanza de que pueda ser devuelto a la vida en un futuro, la criogenización humana por el momento ha formado parte de las bases de la ciencia ficción. ¿Pero puede la criónica ser una vía factible para ser devuelto a la vida en el futuro?

El otro día murió el padre de la criónica a los 92 años y lo criopreservaron. Más concretamente, a 196°C bajo cero. A la espera de que dentro de décadas o siglos exista un método seguro de a) descongelarlo b) curar su enfermedad y c) hacer todo lo anterior conservando sus recuerdos y demás funciones vitales. ¿Seguiría el hombre congelado siendo la misma persona si le transplantan la mayor parte de su cuerpo?. ¿Se perderían los recuerdos durante la fase de congelación?. ¿Se podría copiar el cerebro al completo a algún tipo de soporte físico?

Varias personas relacionadas con distintas disciplinas, así como científicos e investigadores en diferentes ramas del conocimiento se han unido para crear la Asociación Iberoamericana de Criopreservac...

Estos días ha muerto Robert Ettinger, el padre de la criónica, esa idea / movimiento social con tintes científicos –aunque bastante cuestionada– que propone que la gente sea congelada tras su muerte cerebral confiando en que años o siglos después pueden ser despertados y curados de sus enfermedades como si nada hubiera pasado.

“Until Cryonics Do Us Part” es un interesante artículo publicado en The New York Times que plantea la siguiente situación: ¿qué ocurre con las parejas en las que uno de ellos ha pagado por crionizar su cuerpo y al otro no le parece bien? Por lo visto, tal y como relata Kerry Howkey en el artículo, los candidatos a la criónica suelen encontrarse con esta situación y hasta tienen un nombre para ella: “el síndrome de la esposa hostil”. El creador de este movimiento, Robert Ettinger, ya advertía en 1964 que esta obsesión suya por seguir viviendo..

La criónica (congelación de los seres humanos con la idea de ser resucitados en el futuro) es ilegal en Francia y gran parte del mundo, pero KrioRus ya ha almacenado cuatro cuerpos completos y las cabezas de ocho personas en recipientes metálicos lleno de nitrógeno líquido. KrioRus es el primer laboratorio fuera de Estados Unidos o Reino Unido, que promete preservar el cuerpo de una persona, para que en el futuro gracias a los avances de la nanotecnología y la medicina se pueda revertir su causa de muerte.

Uno de los hombres más ricos de NorteAmerica, Mike Cohen, ha anunciado publicamente que crée fehacientemente en los fundamentos cientifico de esta nueva tendencia y por tanto él también optará por "criogenizarse" una vez muerto, siguiendo una tendencia de varios de sus compatriotas multimillonarios que en un futuro descansarán en paz... hasta nuevo aviso. Esta serie de adhesiones de billonarios a la crionica supondra una enorme inyeccion de dinero y por tanto investigacion en este campo. Parece ser que la muerte será cosa de pobres en un futuro