Después de que la Guardia Civil conociera, de forma extraoficial, que en los restos del edificio se encontraron bombonas de gas butano y propano, y que sus ocupantes eran musulmanes, hubo una solicitud para que se permitiera el acceso a la zona por parte de los TEDAX. Querían analizar los restos de la deflagración. La respuesta de los Mossos, sin embargo, fue una tajante negativa. Tal y como explican a este diario fuentes del Instituto Armado, “se nos comunicó que no había autorización por parte de ‘los de arriba’, sin entrar en más detalles”.