Aunque estaba advertido, no se echó a atrás en ningún momento. Kiko Rivera, también conocido como Paquirrín, una de las actuaciones estrella de las fiestas de Vilaboa en el municipio coruñés de Culleredo, lo sabía. En las redes sociales se estaba tramando una acción contra su visita como disyóquey a la localidad. Varias personas pretendían frustrar su actuación. Y al final lo consiguieron. Cuando el pasado lunes enfilaba la recta final de su sesión, una botella de cristal le impactó en un brazo.