El pasado 1 de marzo, la empresa minera que explota el entorno de las Lagunas de Ambroz procedió a realizar un movimiento de tierras sobre uno de los taludes de la Laguna Grande de Ambroz (Madrid). Según los ecologistas, en ese talud se encuentra una colonia de abejarucos europeos, un ave migratoria que pasa el invierno en África y que tiene una veintena de nidos excavados en ese lugar a los que regresan para criar todas las primaveras estando prohibida su destrucción legalmente.

El abejaruco es una de las aves más bellas de Europa, si no la que más. Yo no me canso nunca de admirar sus colores tropicales (rojos, amarillos, verdes, azules), su silueta aerodinámica, su reclamo de silbato inconfundible, sus garabatos en el aire. El nombre castellano de este pájaro lo dice todo. Es un especialista en el consumo de abejas, aunque también se alimenta de otros insectos voladores. Para los amantes de la naturaleza es la alegría de los campos españoles, pero para algunos apicultores son un problema pues se come algunas de sus

El tradicional sistema productivo mielero se ve afectado por la proliferación del abejaruco (a causa de la sequía) dando lugar a un debate político sobre como gestionar el problema. Podemos responde a las propuestas de la Junta.

La organización agraria Asaja Extremadura ha cifrado en hasta un 40 por ciento las pérdidas que están sufriendo los apicultores de la región por el descenso de la producción de miel en la presente campaña debido a la «masiva presencia» de abejarucos, una especie invasora de ave que está «especialmente protegida» en la comunidad autónoma. El presidente de la sectorial de Apicultura de Asaja Extremadura, Paulino Marcos, sostiene que estas aves están provocando una «auténtica devastación» en las abejas, a las que aniquila.

Critican vandalismo sobre la simbólica estatua del lince a la entrada de la reserva del CSIC y el destrozo de colonias de huevos de abejarucos.

Miembros del cuerpo de Agentes Rurales de la Generalitat han pillado 'in fraganti' a un apicultor relacionado con una importante empresa apícola de Aragón mientras manipulaba veneno para matar a abejarucos, un tipo de pájaro protegido que come abejas, en diversas zonas de las comarcas del Segrià y La Noguera (Lleida). Se trata del único caso de este tipo detectado este año, aunque durante los años 2003 y 2004 se detectaron otros similares en la provincia de Lleida y se identificaron a nueve personas implicadas.

Un alado arco iris lleva el vuelo del abejaruco, y los gorriones se enredan en el amor como dos nudos de pluma en celo. Una luz cuasi excesiva abre de par en par el día por donde el olivo engorda frutos o la remolacha tapa la tierra con la dura lechuga de sus hojas.

Enlazo a Caborian y no a la fuente original (www.20minutos.es/noticia/967782/0/) puesto que no incluye la foto.Una imagen de un grupo de abejarucos, realizada por el fotógrafo abulense José Luis Rodríguez, ha obtenido el primer premio de la sexta edición del Concurso Fotográfico de Naturaleza, convocado por la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Extremadura, con motivo de la Feria Internacional de Turismo Ornitológico (FIO).

Un hombre que ahorcó a sus dos perros en una localidad de la Siberia se sentará en el banquillo acusado de un delito de maltrato grave a animales domésticos, para quien se solicita un año de cárcel. Así mismo, la Fiscalía de Badajoz ha presentado una acusación contra un apicultor que envenenó palos para matar abejarucos. Compró un potente insecticida y lo utilizó para proteger sus colmenas de estos pájaros. El efecto de ese veneno sobre los abejarucos es mortal: al posarse el veneno traspasa la piel de las patas y les causa la muerte.

[c&p] Luego de atrapar un abejorro en pleno vuelo, un abejaruco usa una técnica comprobada para evitar el aguijón: golpea el insecto contra una rama hasta inmovilizarlo, luego frota el aguijón contra la corteza para sacar el veneno.

Viendo esta serie de fotografías te darás cuenta de por qué este pájaro es capaz de pintar el cielo de casi todos los colores: es.wikipedia.org/wiki/Abejaruco : "En el año 1890 el naturalista Edward Wright realizó un estudio muy curioso sobre la coloración de esta ave, llegando a la conclusión de que todos los colores excepto el rojo estaban presentes en su plumaje, el rojo no estaba presente en su plumaje pero sí en el iris de los ojos de los ejemplares adultos." Más en ngm.nationalgeographic.com/2008/10/bee-eaters/barcott-text .