Pedro Sánchez se dio un baño de masas ayer en Cibeles tras recuperar la secretaría general del PSOE frente a su rival Susana Díaz. La expedición sanchista llegó a Cibeles pasadas las 2:30 horas de la madrugada. Fue entonces cuando se desató la locura, con la afición coreando el nombre de su líder pese a la dificultad de gritar “PDRO” con la ayuda de una sola vocal. La militancia también entonó cánticos en contra del aparato del partido, entre ellos el más celebrado: “Barón, cabrón, saluda al campeón”.