Donald Fagen interpreta "I.G.Y.", del album de 1982 "The Nightfly". Relacionada: Las cápsulas del tiempo de la Westinghouse Electric.

Según estudio realizado de la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos. 'P. Aeruginosa' arma su virus residente para explotar las distintas respuestas del sistema inmunitario a las infecciones bacterianas frente a las virales. Lo que induce al sistema inmunitario a desarrollar una respuesta antiviral e ignorar la infección bacteriana.

Un análisis realizado por científicos españoles para determinar el método que utilizan los fagos para infectar a las bacterias. El estudio ha determinado que distintas especies de fagos pueden comunicarse entre sí, aunque todavía se desconoce cuál es la función biológica de esta comunicación. Este descubrimiento podría usarse para activar estos microorganismos contra bacterias patógenas o contra elementos resistentes ante antibióticos de todo tipo. Los bacteriófagos, también llamados fagos, son los virus más abundantes que existen en la Tierra.

El fragmento de Fagan, una parte del Partenón que el gobierno de Sicilia intercambió con Grecia el pasado mes de enero, se quedará definitivamente en Atenas.

Un virus podría ser la solución, y no la causa, de la próxima pandemia. El nuevo y microscópico aliado de la humanidad recibe el nombre de bacteriófago, alias “fago”. Y en ese sufijo de origen griego está la clave: este virus con aspecto de robot se “come” a las bacterias.
El objetivo de la comunidad científica ahora es ser capaz de dirigirlo y usarlo como “herramienta biomédica” frente a la resistencia de las bacterias a los antibióticos.

De ascendencia afroamericana, Fagen fue enviado a Filipinas en el verano de 1899 como parte de la fuerza expedicionaria enviada a través del Pacífico para aniquilar al Ejército Revolucionario Filipino, que luchaba por establecer su naciente república. Las fuerzas filipinas colocaron carteles y volantes distribuidos con mensajes alentando a los soldados "de color" a unirse a su causa, apelando a su sufrimiento común a manos de los blancos estadounidenses...

A diferencia de los antibióticos de amplio espectro, ideados para combatir cualquier infección, los fagos son totalmente específicos. Todos contenemos millones de fagos en nuestro cuerpo, pero una bacteria concreta necesita su némesis fágica para ser desactivada. La terapia tuvo una edad dorada a principios de siglo en el Instituto Pasteur gracias a su descubridor, Félix d'Herelle, pero tras el descubrimiento de la penicilina cayó en el olvido... a excepción de tras el telón de acero.

timples y ametralladoras. Canarias tuvo su grupo armado, las Fuerzas Armadas Guanches. Su banda sonora fue Aitiden Guanche, grabada por canarios exiliados en Venezuela «Pedante, soberbio, prepotente, ladrón, traficante de drogas, asesino, explotador, racista, inquisidor, incapaz», son algunos de los insultos que sobre el llamado «godo» pueden escucharse en «Canto a los guanches», la primera canción de la increíble casete de Aitiden Guanche, la banda sonora de las Fuerzas Armadas Guanches.

El 18 de enero se publicaba en Nature el descubrimiento de un sistema de comunicación entre virus de bacterias (fagos). Los virus se preocupan por los virus que vienen detrás de ellos. Cada familia de virus tiene su propio idioma. Comunicarse entre ellos los vuelve todavía más poderosos. Pueden elegir, con conciencia, entre ser competitivos o ser agresivos. Todo indica que debemos de cambiar nuestra manera de pensar y admitir que los virus son seres vivos. Tiene un comportamiento sofisticado y han evolucionado a partir de un mismo ancestro com

El tratamiento se llama "terapia de fagos" e involucra el uso de virus naturales para tratar infecciones bacterianas patogénicas. Se sabe de ello desde que, en 1913, el bacteriólogo británico Frederick Twort descubrió un agente bacteriolítico que infectaba y mataba a las bacterias.

Un grupo de arqueólogos de la Universidad Brigham Young de Estados Unidos realizaron un espectacular descubrimiento: un cementerio con más de un millón de momias egipcias. Algunas fueron datadas entre el siglo I y siglo VII después de Cristo.

Cada vez más a menudo aparece una nueva cepa bacteriana que es resistente a antibióticos. Algunas incluso son resistentes a muchos antibióticos, ¿cómo podemos combatirlas? [...] El bacteriófago T7 es un virus que mata E. coli. Nuestro grupo trabaja en fibras de fagos, las “patitas” de esas naves espaciales que parecen los fagos... Relacionada: www.meneame.net/story/as-manga-fagos-virus-tiflis

No todos los virus son malos para nosotros. No todos los virus son buenos para las bacterias. De un principio tan simple, se puede extraer toda una rama con la que tratar infecciones bacterianas. ¿Y como? con bacteriófagos, como ya probaron en la URSS hace tiempo.

Incluso las bacteria enferman, por muy minúsculas que sean, las bacterias pueden ser infectadas por un virus más pequeño conocido como fagos . Como pequeñas agujas hipodérmicas, los fagos inyectan su material genético en sus anfitriones bacterianos, convirtiéndolas en fábricas para hacer más fagos. El anfitrión generalmente muere. Sin embargo, algunas bacterias han convertido a estos enemigos en sus aliados. Mediante la adición del ADN de los virus a sus genomas, convirtiendose en super bacterias capaces de ser inmunes frente a los antibióticos

En la madrugada del 9 de Julio de 1982 Michael Fagan logró lo que hasta entonces era técnicamente imposible: acceder al Palacio de Buckingham y llegar hasta el dormitorio de la reina Isabel II. El desempleado, irlandés y padre de cuatro niños consiguió evadir las alarmas electrónicas a la guardia real y a la policía de palacio. La reina se despertó cuando el intruso abrió una cortina y se sentó en la esquina de su cama. Estuvieron hablando unos diez minutos hasta que él solicitó un cigarro y la reina pudo accionar la alarma ...

En nuestro empeño por protegernos de la naturaleza, los seres humanos cada vez somos más vulnerables a los desastres producidos por el clima. Esta es la conclusión de Brian Fagan en El Largo Verano, un libro que recoge los cambios climáticos en los últimos 15 mil años y sus implicaciones con el auge y la desaparición de las civilizaciones.