El alma ociosa que busque en internet descubrirá rápidamente el sentir general sobre la tarea del crítico literario. Aquí los calificativos más populares: escritor frustrado, cavernario, envidioso, pusilánime, cuenta-chicles, perro, mezquino intelectual, proletario intelectual, extraterrestre, perro (otra vez), truhán de baja estofa, insatisfecho sexual, inútil. Hay quien haciendo gala de pulcritud estilística logra que la palabra "erudito" suene a insulto también.