Soy absolutamente optimista. Pese a las dificultades que puedan surgir de aquí en adelante, estamos viviendo un día histórico. Se rinden, sin condiciones. Habrá que dejar de lado la retórica, las declaraciones grandilocuentes y la estética retro que tanto gusta a los terroristas de ETA. Se acabó. La de hoy es la noticia que todos hemos querido dar, que todos hemos querido leer, que todos hemos querido escuchar. Necesitamos altura de miras, pedir a los políticos que dejen de contar lo votos, que no valoren a quién favorece o a quién perjudica.