Una de las primeras personas en socorrer a la víctima fue su propia hija, que en el momento de la agresión se encontraba dentro de la inmobiliaria. Al percatarse de lo ocurrido, salió del negocio al grito de «papá, papá» e intentó tapononarle la herida. Mientras todo esto sucedía y según apuntan algunos testigos, el agresor, se encontraba merodeando por la zona, «impasible» con el cuchillo en la mano. Hasta la llegada de la Policía Local, que procedió a su detención.