El nuevo proyecto de ley presenta un notable cambio de orientación, resultado de una serie de recomendaciones que desde distintos ámbitos, jurídicos, memorialísticos, académicos y asociativos, se hicieron con este fin, y cuya concreción en el texto del anteproyecto trataremos aquí de resumir. Se pone de manifiesto, en primer lugar, la necesidad de llevar a cabo una política pública de memoria, que, siguiendo los principios del derecho humanitario internacional, dignifique a las víctimas de la guerra civil y de la dictadura.