Serbia, Croacia y Bosnia-Herzegovina podrían fusionarse en un nuevo país, con capital en Sarajevo, llamado Serbocroacia. Un idioma, el serbocroata; dos sistemas de escritura, el latino y el cirílico; y tres religiones, el cristianismo católico, el cristianismo ortodoxo y el islam. Kosovo sería reconocido como país independiente y Voivodina gozaría de autonomía y derecho de autodeterminación. Un país unitario de carácter socialista y liberal.