El presidente ruso, Vladímir Putin, ha aterrizado este martes en Corea del Norte y, poco después de una reunión de dos horas con el dictador Kim Jong-un, ambos mandatarios han comparecido para solicitar formalmente el ingreso de sus respectivos países en la Unión Europea. En un comunicado conjunto, han reconocido los «importantes avances» que ha hecho Europa a la hora de «propiciar un acercamiento a nuestros valores», mostrándose abiertos a un cambio en las relaciones diplomáticas «ahora que parece que hablamos un idioma común».