Symphony, el yate de 101 metros del dueño de Louis Vuitton,no pudo atracar en el puerto de Mergellina, Nápoles ,debido a una nueva regulación que impide hacerlo a yates de más de 75 metros,algo ha dejado a los multimillonarios "completamente decepcionados".“Es una vergüenza,no podemos recibir a visitantes del calibre de Leonardo DiCaprio,Jeff Bezos o Jennifer López”, dice Massimo Luise. Mientras, los ricos disfrutan en otras partes de Italia y una fan española casi se ahoga en Forte dei Marmi tras intentar llega nadando al superyate de DiCaprio