Fruto de dichas relaciones nació un bebe manifestando N. y el acusado que éste es el padre, aunque la filiación paterna no se encuentra reconocida. Según la sentencia, el acusado, condenado además por varios delitos, de malos tratos, robo con fuerza, y tráfico de droga, “cuenta con una muy escasa formación, actuó en la creencia de que la conducta consistente en las relaciones sexuales, siendo consentida y promovida por la menor y él mismo, conocida, tolerada y 2 aceptada por la familia de N., no se encontraba penada por la ley. ”