La pieza entera tenía unos 350 kilos de peso y su precio de salida se estimaba en torno a los 4.000 euros, según coincidían responsables del puerto pesquero y comercializadores. No había tampoco ninguna duda de que el atún rojo, los cuatro, iban a ser vendidos. La captura de un atún rojo tiene que ser comunicada a la Autoridad Portuaria y a la Secretaría General de Pesca del Ministerio de Agricultura. Además, debe ser puesta en conocimiento por el organismo regulador internacional de esta especie, que controla que no haya sobrepesca.