Casos como este proporcionan una justificación muy socorrida a los que nunca se les ha pasado por la cabeza colaborar con una ONG, y siembran dudas más que razonables en quienes alguna vez lo han hecho. Hay mucha gente que piensa que hoy en día no se puede uno fiar de nadie, y tienen mucha razón. De modo que seamos consecuentes y, puestos a no fiarnos de nadie, desconfiemos también del medio que destapó el asunto. El escándalo, como muchos sabrán, fue sacado a la luz por el periódico The Times, propiedad de Rupert Murdoch.