Nakira Griner, una mujer de Nueva Jersey, Estados Unidos, fue acusada de matar a su hijo de casi dos años, porque, según explicó a la policía, el niño "no la escuchaba". Los fiscales del condado Cumberland, aseguraron que la madre, en un inicio, había reportado que el menor había sido secuestrado el viernes por la noche. Cuando el equipo de investigadores comenzaron a buscar al menor, con la ayuda de agentes estatales, dieron con el cuerpo sin vida del niño, en el jardín de Griner.