Una espectadora le reclamó a viva voz que hablara en castellano, el público censuró con abucheos tal petición y Serrat, desde el escenario, pidió respeto por la lengua que se habla en este territorio: «Explicarnos en nuestro idioma nos ha costado años de lucha». A continuación, invitó a la señora a abandonar el recinto con el compromiso de que se le abonaría la entrada. Tras las palabras del Nano, tres personas se levantaron de sus asientos y abandonaron la sala.