El termómetro supera los 30 grados en Palma de Mallorca a media tarde, aunque oficialmente aún no ha llegado el verano. Pere Joan, graduado en Historia del Arte y activista en Fridays for Future, pide una granizada de almendras, uno de los frutos secos que se cultivan en la isla. Hace unos días fue uno de los participantes en la acción convocada por la plataforma Mallorca Platja Tour para ocupar el Caló des Moro.