La historia se repite : una persona sufre problemas de digestiones pesadas, hinchazón y gases, acidez, diarreas frecuentes. Le hacen un sencillo test de aliento y le dicen que libera mucho más hidrógeno de lo normal, debido a un sobrecrecimiento de bacterias en el intestino delgado. Le recetan antibióticos. Como consecuencia se altera toda la microbiota intestinal y le recomiendan que tome probióticos para reponerla. Quizá, de paso, le proponen hacer un análisis completo de la microbiota intestinal a partir de una muestra de de heces (...)