El sacerdorte estadounidense Robert Geisinger, designado por el Papa Francisco como el fiscal del Vaticano para los delitos sexuales, fue uno de los dignatarios eclesiásticos que no denunció a un sacerdote abusador a la justicia antes de que éste, ahora en la cárcel, cometiera otros abusos sexuales, según documentos jurídicos revisados por The Boston Globe.
www.bostonglobe.com/metro/2014/11/22/vatican-new-top-prosecutor-abusiv