El mayor negocio lo hizo González en 2014 con la entrada del gigante tecnológico Indra en la consultora de su hijo Pablo, una extraña operación que solo reportó pérdidas a la cotizada. En concreto, el expresidente del Gobierno metió 376 euros en la diminuta firma de su vástago, Oyauri Investment, y vio cómo el valor de su participación se revalorizaba más de un 82.000% cuando Indra decidió entrar en el capital social de la empresa inyectando inexplicablemente 1,5 millones de euros.
|
etiquetas: felipe gonzález sa , psoe , fortunas , indra