Hemos analizado cómo controlar a una paleta rectangular en el Pong de 1972 suponía afrontar un partido, y cómo hacer lo mismo en el Thomas Was Alone de 2010 implicaba asomarse a las relaciones humanas. Ahora toca observar por qué no es lo mismo ponerse al mando de un comecocos en 1980 que hacerlo rodar por 2020. Spoiler: lo primero implica masticar mucho y lo segundo poliamor, consuelo en brazos de amantes y desengaños emocionales.
|
etiquetas: pac-man , poliamor , existencialismo